El mundialmente famoso aficionado a los coches Jay Leno sufrió un trompo en un Carrera GT mientras conducía en la pista de Talladega en 2005. Porsche ha declinado hacer declaraciones oficiales sobre la muerte de Walker o sobre si fue consecuencia de un error mecánico o del conductor. Walker no fue el primero en morir en este coche; hubo otro accidente mortal del Carrera GT en el California Speedway durante 2006. El caso llegó a un acuerdo extrajudicial de $4,5 millones. El caso sacó a la luz una importante cuestión: sin control electrónico de estabilidad, ¿diseñó Porsche un automóvil extremadamente letal?
Se fabricaron menos de 1.300 unidades del supercoche V-10 de 610 CV Porsche Carrera GT; el precio de venta al público ronda los $450.000. Walker iba como pasajero a un lado de su asesor financiero, amigo y propietario del vehículo. El conductor perdió el control del volante antes de colisionar con un árbol, lo que hizo que el vehículo estallara en llamas.
Las víctimas de accidentes pueden ponerse en contacto con abogados locales para que les ayuden a tratar con aseguradoras y funcionarios judiciales. Los abogados trabajan habitualmente con estos otros profesionales para evaluar con precisión la responsabilidad, la negligencia o cualquier indemnización debida a la víctima del accidente a causa del siniestro. Algunas víctimas incurren en importantes gastos sanitarios a largo plazo como consecuencia del accidente de tráfico. Los abogados locales pueden ayudar a las víctimas de accidentes a reunir las pruebas pertinentes, reconstruir la escena del crimen y prepararse también para el juicio.
Fuente: Forbes, "Pilotos profesionales, Jay Leno también se peleó con el Porsche que mató a Paul Walker", Hannah Elliot, 03 de diciembre de 2013